Ante la nueva realidad derivada de la pandemia del COVID-19, los directores financieros se han dado cuenta de la necesidad de realizar cambios tanto para la supervivencia del negocio como para aprovechar las oportunidades fruto de la acelerada transformación digital. Ahora es posible renunciar a más tareas operativas para centrarse en actividades estratégicas y decisivas. Lo mejor: una multitud de datos a su disposición para obtener las mejores percepciones y previsiones. El hecho es que la tecnología se ha convertido en la mejor opción para hacer posible la estrategia empresarial.

Estas afirmaciones pueden ser confirmadas por nuestra Encuesta Global de Directores Financieros. Indica que el 73% de ellos está reequipando su departamento de finanzas con las últimas tecnologías. El objetivo es ampliar la influencia en toda la empresa. La encuesta indica que 7 de cada 10 (72%) directores financieros tienen la última palabra sobre la dirección de la tecnología adecuada para el negocio y el 51% de los ejecutivos de finanzas es consultado desde el principio para dar forma a la agenda de la tecnología digital.

Sin embargo, hay un gran "sin embargo" en este proceso de transición: ningún director financiero puede liderar una ola de digitalización empresarial sin entender las inversiones en la nube y qué plataformas impulsan la innovación y los conocimientos basados en datos. A través de la nube, es posible abrir las puertas a un nuevo nivel estratégico y lograr resultados antes desconocidos. Además, con esta nueva visión de la tecnología, el director financiero puede ofrecer capacidades específicas a los trabajadores de forma más rápida, eficaz y eficiente.

Algo tan comentado como la nube puede apalancar financieramente a una empresa. Pero mucho más que eso, esta tecnología puede generar un gran valor para las empresas. Los hipercálculos, centros de datos que ofrecen estos servicios informáticos, permiten a la empresa desbloquear el valor de tres maneras diferentes:

Más crecimiento e innovación

Reinventar e innovar requiere una infraestructura de nube sólida y robusta. Esto se debe a que es la plataforma sobre la que se construirán la mayoría de los futuros modelos de negocio y las ofertas a los clientes hiperdirigidas.

Mayor eficiencia operativa

Con la ayuda de la nube, las decisiones operativas pueden ser más ágiles y eficientes. Todo ello con la ayuda del análisis de datos en tiempo real.

Menor costo de TI

Al trasladar el CAPEX al OPEX, la nube puede reducir significativamente el costo de la propiedad de TI. También impulsa el consumo y el gasto tecnológico hacia los resultados empresariales.

Para tener más impacto en la nube hay que formular un enfoque amplio y estratégico. Esto puede acelerar y maximizar el impacto de la nube.

En lugar de tener una planificación estática, las empresas pueden centrarse en capacidades específicas para contribuir a la eficiencia operativa, el crecimiento y la innovación. Permitir que las decisiones sobre la nube se autofinancien casi en tiempo real, en lugar de esperar a que la optimización tradicional de los costos de TI desencadene las inversiones.

Accenture, con su larga cartera de migraciones y su experiencia, ha elaborado un enfoque dinámico para ayudar a las empresas a definir la dirección que debe tomar su viaje a la nube, haciendo avanzar el negocio en tres frentes: migrar, acelerar, crecer e innovar.

La función principal del director financiero durante el viaje a la nube es garantizar la viabilidad financiera de la empresa en un mundo volátil e incierto. En estos momentos de inestabilidad, pueden ser necesarias nuevas formas de planificación, en la mayoría de los casos sin mucho margen para el error y la pérdida de horas de trabajo. Para hacer frente a la volatilidad financiera en la cadena de valor es necesario crear una directriz financiera completa y consolidada.

1. ¿Cómo podemos organizarnos?

Estructurando un nuevo modelo de funcionamiento. Y fomentando la colaboración entre las TI y las áreas de negocio. Sin esto, las empresas tendrán dificultades para aprovechar el potencial de la nube e impulsar el cambio.

2. Cómo impulsar el cambio incluso con sistemas obsoletos

La atención debe centrarse en la modernización de las capacidades básicas que impulsan los cambios necesarios para la innovación y la reinvención de las empresas. Los directores financieros nunca deben financiar grandes programas de modernización sin que haya hitos intermedios significativos en el camino.

3. ¿Está la informática preparada para ello?

En primer lugar, los equipos deben estar cualificados para apoyar la transformación en la nube. Las capacidades se rompen en tres frentes:

1. Requiere conocimientos de ingeniería y tecnología de la nube para migrar la infraestructura y el software.
2. Una infraestructura en la nube más sólida requiere conocimientos de arquitectura nativa de la nube, datos e ingeniería de productos.
3. La arquitectura de datos, los conocimientos de IA y la experiencia en modelos de negocio son esenciales para innovar y crecer.

El 95% de las aplicaciones de Accenture está en la nube. Ayudamos a las empresas de todo el mundo a obtener más valor de la nube. Además, ofrecemos un tiempo de migración hasta un 50% más rápido, una mejora de hasta el 35% en la eficiencia de la gestión de la nube y una implementación hasta un 75% más rápida en SAP, Oracle y DevOps.

Los servicios integrales en la nube de Accenture combinan enfoques orientados al valor y criterios de evaluación tecnológica para optimizar la entrega de soluciones a velocidad y escala.

Ayudamos a encontrar nuevas y mejores formas de aprovechar la nube para desbloquear el valor, ayudando a los directores financieros, a los departamentos de finanzas y a la empresa a alcanzar toda la promesa de la nube, desde el control de costos hasta la elasticidad y la innovación.