
COVID-19: Crear una empresa inteligente para aumentar la agilidad y la resiliencia
Abril 23, 2020
Abril 23, 2020
Incluso antes de la llegada del COVID-19, la disrupción ya suponía una amenaza constante para la mayoría de las empresas. De hecho, el estudio realizado por Accenture indica que la mayor parte de los ejecutivos consideran que el ritmo de la disrupción ha aumentado en los últimos tres años, y el 93% asegura que la propia existencia de su empresa se está viendo amenazada por modelos operativos con los que no pueden competir.
Sabemos que la crisis del COVID-19 no es una recesión clásica, ya que los cambios fundamentales en los comportamientos de los consumidores, en las cadenas de suministro y en las rutas de comercialización están afectando significativamente al balance económico de las empresas. Aunque algunos cambios son temporales, hay cosas que nunca volverán a ser iguales, y lo extraordinario se convertirá en lo ordinario. Los directivos deben adoptar rápidamente formas ágiles de trabajar y de transformar su cadena de valor para superar la incertidumbre y adelantar a los que están menos preparados. Adoptar las medidas correctas AHORA permitirá posicionar a las empresas para tener éxito en el FUTURO y adaptarse a lo EXTRAORDINARIO.
Convertirse en una empresa inteligente implica abandonar el modelo jerárquico de toma de decisiones, empoderando a equipos guiados por un propósito, adoptando decisiones basadas en los datos y en la tecnología, y aprovechando los beneficios del Cloud para acelerar el proceso de comercialización. Requiere acabar con las estructuras rígidas basadas en el territorio y el control, y crear una organización permeable con módulos listos para operar. La "empresa inteligente" es capaz de llevar a cabo una autogestión dinámica y una adaptación continua. Está diseñada para impulsar la agilidad, la resiliencia y el crecimiento.
El 75%
de las empresas consideran que el ritmo de la disrupción ha aumentado en los últimos tres años
El 93%
de las empresas aseguran sentirse amenazadas por modelos operativos con los que no pueden competir
El 63%
de los ejecutivos señalan la toma lenta de decisiones como una barrera para la agilidad
La respuesta a la pandemia ha dejado claro qué trabajos resultan esenciales y cuáles son prescindibles. Ha puesto a prueba la creencia tradicional de que se necesita una proximidad física con clientes, productos y gestores, trasladando un enorme volumen de trabajo a la esfera virtual.
No hay duda de que las empresas que cuentan con modelos operativos más ágiles están recogiendo el fruto cosechado en los últimos años.
Evalúa a tus socios y apóyate en tu ecosistema para acelerar tu percepción y tu innovación.
Ahora es el momento de desarrollar y ejecutar una estrategia de cadena de suministro ágil que sea capaz de guiar a tu empresa en el presente y en el futuro. Una cadena de suministro ágil mejora la capacidad de detección de la demanda, la localización y el flujo de productos, y se convierte en un reflejo de la variabilidad de la oferta actual y del nivel de satisfacción de los clientes. Incorpora planes de continuidad empresarial mediante la diversificación en la cadena de suministro y los canales de distribución, los modos de transporte, y los socios de ecosistemas y alianzas.
En otras partes de la cadena de valor, como los departamentos de marketing, ventas y asistencia, las organizaciones deben ser ágiles a la hora de adaptarse a la nueva realidad de dirigir un negocio. También existe la oportunidad de integrar ventas y operaciones, planes de oferta y demanda basados en un análisis prescriptivo y predictivo, y un equipo capacitado para aportar información empresarial crucial, todo ello aprovechando las plataformas de análisis empresarial para facilitar la disponibilidad de la información dentro de la organización. Se trata, sin duda, de una capacidad requerida urgentemente, que seguirá siendo igual de esencial de cara al futuro: los "sensores terminales".
A medida que nos adentramos en el futuro y nos preparamos para la nueva normalidad, la mayoría de las organizaciones están diseñando rápidamente procesos que permitan mejorar su eficiencia, ya que confían en recursos ubicados físicamente lejos de sus productos, clientes y directivos, y dependen cada vez más de los socios del ecosistema que se encuentran mejor preparados para desempeñar su actividad en un entorno remoto o virtual.
Las medidas que las empresas están adoptando ante la pandemia del COVID-19 están acelerando la adopción de un modelo de empresa inteligente. Además de centrarse en las necesidades urgentes del AHORA, las empresas deben acelerar la creación de una empresa inteligente que se encuentre preparada para el FUTURO, siendo capaces de superar la incertidumbre de la nueva normalidad. Nosotros podemos ayudarte.