INFORME
Innovar o desaparecer
Las empresas europeas tienen que frenar el déficit tecnológico
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En resumen
- En enero de 2023, nuestro estudio Cómo acelerar el camino de Europa hacia la reinvención reveló que las empresas no están aprovechando la tecnología para generar valor y crecimiento.
- Frenar el déficit tecnológico en Europa exige acciones concentradas en múltiples frentes.
- Esas acciones abrirán nuevas oportunidades y llevarán a las empresas europeas al liderazgo en industrias clave.
Reducción del déficit tecnológico: un dividendo de crecimiento para Europa
En enero de 2023, nuestro estudio “Cómo acelerar el camino de Europa hacia la reinvención” reveló por qué las empresas europeas están por detrás de las de Norteamérica (NA) y Asia-Pacífico (APAC) en crecimiento de ingresos. Según nuestro estudio, uno de los factores que lastran las perspectivas de crecimiento de las empresas europeas es una adopción inadecuada de tecnología; es lo que llamamos “déficit tecnológico”.
Nuestro nuevo análisis indica que las previsiones de crecimiento de ingresos en Europa están mejorando, pero también confirma que el déficit tecnológico sigue ahí, amenazando con volver a tener un crecimiento económico relativamente débil a largo plazo.
¿Qué es el déficit tecnológico?
Empleamos el término “déficit tecnológico” para referirnos a la disparidad en la adopción, la aplicación o el uso eficaz de la tecnología (tanto tradicional como de vanguardia) para generar valor para el negocio.
Esto va más allá de las inversiones en tecnología, abarca el liderazgo, las habilidades, la prevalencia de modelos de negocio digitales y la capacidad de las empresas para generar valor con la tecnología.
Cómo hacer frente al déficit tecnológico
Las empresas que partan de una sólida base digital para su reinvención integral obtendrán una importante ventaja competitiva. El beneficio potencial para las empresas europeas es elevado, ya que asciende nada menos que a 3,2 billones de dólares en ingresos adicionales a finales de 2024.
Las empresas tecnológicas no serán las únicas beneficiadas. Las mejores oportunidades se encontrarán en industrias como retail, life sciences, mobility o seguros, donde la tecnología puede ayudar a crear nuevas fuentes de ingresos con productos y servicios más inteligentes y operaciones más eficientes en toda Europa.
La situación de Europa es especial. Cuenta con una extraordinaria diversidad, un rico tapiz de culturas y políticas nacionales fuertes. Pero también se beneficia de las sinergias, la cohesión y la unidad que aporta el mercado único de la UE. Las estrategias de crecimiento para Europa deben tener en cuenta circunstancias particulares, entre las que destacan cinco que requieren especial atención.
Una estrategia para Europa
1.
Dependencia económica y tecnológica. Europa es una región de economía interconectada y con una fuerte dependencia de los mercados de exportación, las importaciones de tecnología y componentes, y los recursos naturales.
2.
Reducción de los trabajadores. El porcentaje de personas en edad de trabajar (20-64 años) sobre la población total de la UE caerá del 59 % en 2022 al 50 % en 2100.
3.
Coste de la energía. Aunque han vuelto a los niveles de antes de la guerra, los precios de la energía en Europa son cinco veces más altos que en Norteamérica.
4.
Búsqueda de autonomía estratégica y armonización con una serie de normativas, pero también creando las mismas condiciones en los 27 estados miembro.
5.
Clara orientación a la sostenibilidad para ser el primer continente que, con el Pacto Verde, elimine en 2050 tantas emisiones de CO2 como las que genere.
Tres áreas prioritarias para reducir el déficit tecnológico
- Crear la base digital para alcanzar nuevas fronteras del rendimiento
- Ampliar la ventaja en fabricación inteligente
- Mejorar el cociente tecnológico en lo más alto
1. Crear la base digital para mejorar el rendimiento
Las empresas europeas tienen que ser más ambiciosas; no solo en automatización, sino para reinventar todas las partes de su organización a partir de una base digital y nuevas formas de trabajar que creen una cultura de reinvención continua.
Según datos de la firma independiente de analistas tecnológicos IDC, Europa y APAC van por detrás de Estados Unidos. Ambas están a niveles comparables en áreas como cloud o big data. Su inversión en tecnología es inferior a la de Estados Unidos, pero las inversiones en IoT e impresión 3D están a la par.
Figura: Inversión europea en TI (en $, 2023)
Fuente: IDC Blackbook 3rd platform data, Mayo 2023
Europa necesita invertir en tecnologías de especial relevancia para sus industrias básicas, como IA, impresión 3D para fabricación o IoT para ciudades inteligentes y energía limpia.
La cloud es esencial para la adopción de nuevas tecnologías (IA generativa, computación cuántica, etc.) y favorece el crecimiento futuro de las empresas europeas.
Cabe destacar que Europa está aumentando su inversión en IA. La IA, y en particular la IA generativa, ha provocado una auténtica revolución. ChatGPT, por ejemplo, solo tardó cinco días en alcanzar el millón de usuarios. La IA ofrece a las empresas europeas la oportunidad de impulsar la innovación, aumentar la eficiencia operativa, ofrecer experiencias personalizadas y obtener una ventaja competitiva en un panorama empresarial que cambia con rapidez.
Las empresas que creen una sólida base de IA, adoptándola ahora que la tecnología está madura y genera un valor evidente, estarán mejor posicionadas para reinventarse, competir y alcanzar nuevos niveles de rendimiento.
El 98 % de los ejecutivos cree que los modelos de IA tendrán un papel importante en la estrategia de su empresa en los próximos 3-5 años.
Para aprovechar la revolución de la IA y favorecer el crecimiento, las empresas europeas tienen que dar prioridad a crear una sólida base digital, incluyendo migración a cloud, traslado de aplicaciones y datos estratégicos a entornos cloud y creación de una moderna plataforma de datos empresariales. Esta base permitirá adoptar la IA generativa y otras tecnologías emergentes, así como garantizar el su cumplimiento, la seguridad y la interoperatividad en la organización.
2. Ampliar la ventaja de Europa en fabricación inteligente
Con una sólida base digital, las empresas europeas pueden innovar para seguir ampliando su ventaja en fabricación inteligente, cadena de suministro y eficacia operativa. Para ello necesitan invertir hoy en modelos de negocio digitales del futuro.
En la actualidad están por detrás de otras empresas en inversión a largo plazo en investigación y desarrollo (I+D) de áreas emergentes y en patentes.
Invertir en I+D es fundamental para la innovación, ya que permite a las empresas mejorar sus productos y servicios para seguir siendo competitivas en el mercado. Las patentes, por su parte, son un importante indicador de innovación.
El retraso en I+D mencionado en nuestro estudio de enero de 2023, Cómo acelerar el camino de Europa hacia la reinvención, ha crecido considerablemente según nuestro nuevo estudio.
110 pbs
En 2021 había una diferencia de 110 pbs (puntos básicos) entre Europa y Norteamérica en el porcentaje de ingresos invertido en I+D.
140 pbs
En 2022 la diferencia creció hasta 140 pbs.
Por lo que se refiere a las patentes, la inversión de las empresas europeas en IA es notablemente más baja que la de las empresas de Norteamérica o APAC. Esta diferencia es aún mayor en el caso de la IA generativa.
No obstante, la inversión en I+D científica ofrece oportunidades a las empresas europeas. Los últimos avances en tecnologías digitales avanzadas, como IA, han acelerado el progreso en todos los campos de la ciencia. Al mismo tiempo, los adelantos científicos están impulsando avances tecnológicos. Esta simbiosis entre ciencia y tecnología puede ser la tarjeta de presentación de Europa, siempre y cuando haga las inversiones necesarias y establezca las colaboraciones adecuadas.
Si invierten en I+D, establecen colaboraciones y exploran nuevos modelos de negocio, las empresas europeas pueden situarse como líderes en inteligencia digital para impulsar la resiliencia, la productividad y la sostenibilidad en todas sus operaciones.
3. Mejorar el cociente tecnológico (CT)
Si quieren explotar el potencial de la tecnología y fomentar la innovación, las empresas tienen que contar con el liderazgo, la mentalidad y los conocimientos tecnológicos necesarios para tomar buenas decisiones y lograr que la organización genere valor con la tecnología. Eso es lo que llamamos "cociente tecnológico (CT)": tener suficientes conocimientos de tecnología para medir, analizar y prever cómo puede hacer que la organización avance.
La necesidad de habilidades tecnológicas va más allá de los departamentos de TI y es básica en todas las funciones de la empresa.
Se trata de una importante área de desarrollo para casi todas las empresas globales, pero sobre todo para las europeas. Aunque los directivos europeos parecen tener más confianza en el acceso a habilidades tecnológicas en Europa, la presencia de expertos en tecnología en los consejos de administración es mucho menor.
No es necesario que las empresas cuenten con una representación excesiva en los consejos, pero aumentar el cociente tecnológico de los consejeros permitirá a las empresas evaluar posibles riesgos y oportunidades, estimar la viabilidad y el impacto de las inversiones en tecnología y tomar decisiones que respondan a sus objetivos generales.
Las empresas europeas deben dar prioridad a aumentar su cociente tecnológico mejorando los conocimientos de sus directivos y ejecutivos con cursos obligatorios, fijando objetivos de aprendizaje claros y fomentando la diversidad de género para contar con una reserva más amplia de talento técnico.
Solo el 14 % de los miembros del consejo administrativo de las empresas europeas analizadas conoce estrategias de negocio que aprovechen la tecnología, frente al 22 % de las empresas de Norteamérica.
Conclusión
Para hacer frente al déficit tecnológico de Europa se necesitan acciones concentradas en múltiples frentes. Muchos piensan que la competitividad europea está en declive, pero nuestro estudio revela progresos en varias áreas importantes.
Pero para impulsar el crecimiento, las empresas europeas deben invertir en adopción tecnológica, digitalizar sus operaciones y cadenas de suministro, innovar con servicios y modelos de negocio digitales, adoptar la IA generativa y mejorar el cociente tecnológico de sus líderes.
Estas acciones ayudarán a reducir el déficit tecnológico, abrirán nuevas oportunidades y situar a las empresas europeas como líderes en sectores clave.