Resumen de tendencias tecnológicas
- Liderar en esta nueva década supone trabajar para redefinir la interacción entre las personas y la tecnología.
- Las personas de la era posdigital tienen expectativas altas, pero las empresas siguen desarrollando productos y servicios tecnológicos posdigitales con métodos del pasado.
- Las empresas deben resolver este desfasaje de expectativas para liberar la promesa de un mundo mejor y más fácil gracias a la tecnología
Se ha hablado mucho del "flagelo tecnológico" (“tech-lash”) o del rechazo de la última tecnología. Sin embargo, los hechos lo desmienten: las personas están usando la tecnología más que nunca. Según la Encuesta de Consumidores de Technology Vision, el 52% de los consumidores cree que la tecnología juega un papel fundamental o está arraigada en casi todos los aspectos de su vida cotidiana. De hecho, el 19% indica que la tecnología está tan integrada en sus vidas que la ven como una extensión de sí mismos. A nivel mundial, las personas pasan en promedio 6,4 horas conectadas al día. Pertenecen a la era posdigital.
En lugar de un flagelo tecnológico, lo que estamos viendo es un choque tecnológico. Las personas no se oponen a la tecnología; la tecnología todavía los entusiasma e intriga. Sin embargo, las empresas están desarrollando e implementando esa tecnología usando manuales de décadas pasadas, propios de una época donde la tecnología no tenía un impacto tan importante y significativo en nuestras vidas. Los ecosistemas cerrados pueden causar un desfasaje de las experiencias. Se aplican soluciones de Inteligencia Artificial a la toma de decisiones, sin transparencia, dejando a la gente al margen de decisiones que afectan directamente a sus vidas. Las inquietudes relacionadas con la seguridad, la privacidad y la ética hacen que las personas sean precavidas sobre la creciente evolución de las innovaciones de las compañías en materia de tecnología digital.
Navegar el choque tecnológico será un desafío clave para los directivos de las empresas en la próxima década. Hasta ahora, las empresas se han beneficiado mucho a partir de las hojas de ruta tecnológicas establecidas por los pioneros digitales. Ahora, la tecnología digital está evolucionando, dejando de ser una ventaja para convertirse en una expectativa básica, y las mejores prácticas de ayer se están convirtiendo en las falencias de hoy. Las empresas deben ofrecer experiencias más focalizadas en lo humano, alineadas con las expectativas de la gente.
Esto significa que el camino a seguir puede guiarse por las expectativas de las personas, pero no existe una única hoja de ruta. El éxito de la próxima generación de productos y servicios dependerá de la capacidad de las empresas para mejorar la experiencia humana, adaptándose al mundo que han creado.
Ninguno de los pasos del camino conlleva cambios incrementales, ni tampoco es tan simple como encontrar la próxima herramienta tecnológica para hacer lo que ya se está haciendo hoy. Para liderar en el futuro habrá que replantearse algunos supuestos fundamentales sobre cómo funciona una empresa y redefinir la interacción entre las personas y la tecnología.
