Todas las decisiones de empleo se tomarán sin importar la edad, raza, credo, color, religión, sexo, origen nacional, ascendencia, grado de discapacidad, estado de veterano, orientación sexual, identidad o expresión de género, información genética, estado civil, estado de ciudadanía o cualquier otro motivo o circunstancias protegidas por las leyes federales, estatales o locales.